
Hoy hablamos de Ballerina, una historia donde se premia el esfuerzo por conseguir los sueños, sean cuales sean, bien bailar en el Gran Teatro de la Opera de París o bien ser un gran inventor. Y de eso se encargan Felicia y su amigo Víctor, los protagonistas de este cuento de superación, ambos huérfanos y compañeros en la adversidad que se aúnan para poder conseguir aquello por lo que suspiran. Ella una niña fuera de lo común con ansias de bailar y él un picarillo que le encanta arreglar cosas. Se embarcarán en una aventura donde la amistad y el esfuerzo son protagonistas. La mejor tradición del cine francés llega ahora a las pantallas en versión animada.
La música, como no podría ser de otro modo, es la otra gran protagonista de esta película, donde se entremezclan grandes clásicos como Tchaikovski o Stravinsky con melodías folk de la Bretaña. Como secundarios hay que destacar la pseudoprofesora de baile, sorpresa incluida, y la malvada jefa de ésta, con hija repelente de regalo.
Como estoy ya acostumbrada a ver todas las películas rodeada de adultos, gracias al pase con niños organizado por A contracorriente Films, pude verla con mi sobrina de 6 años. La experiencia fue inigualable porque la ilusión que reflejaba su cara no tenía precio. Mi pequeña Andrea es una loca del baile, en todas sus expresiones, y esta historia animada fue el escenario perfecto para darle el toque definitivo para querer estar bailando todo el tiempo (los pasajeros del metro de Madrid todavía nos recuerdan y la madre de la niña, también).
En resumen, Ballerina es una delicia de película que puede ser disfrutada en familia o en soledad, porque nos hace soñar. Disponible desde hoy 27 de Enero en muchos cines de España tanto en versión 2D como 3D.
